Hong Kong es uno de los principales centros financieros de Asia y del mundo. Está ubicado en un lugar pintoresco y sísmicamente bastante tranquilo. Sin embargo, según los últimos datos, el área está ubicada justo en un volcán antiguo.
En 2012, los investigadores descubrieron que el centro histórico de Hong Kong, con sus rascacielos y carreteras modernas, crecía justo en la boca de un antiguo supervolcán. Según los expertos, el volcán fue una vez tan grande que cubría tanto el territorio de la moderna península de Kowloon como la propia isla de Hong Kong. La última vez que se produjo una erupción en esta área hace unos 140 millones de años, en la Era Mesozoica. Los investigadores creen que fue esto lo que provocó la extinción de los dinosaurios en esta región. Habiendo estudiado todas las pequeñas islas y rocas de origen volcánico en el área de Sai Kun, los científicos han confirmado su hipótesis de que una vez uno de los volcanes más poderosos se hundió gradualmente bajo tierra.
Los expertos conocen la existencia de tan solo cincuenta volcanes de similar poder, cuyas erupciones podrían provocar cambios climáticos radicales, afectar radicalmente el paisaje y provocar desastres naturales. Según los expertos, la última vez que se produjo una erupción de una fuerza similar hace 27 mil años en el territorio de la Isla Norte, que forma parte de Nueva Zelanda. Gracias a este cataclismo se formó el lago Taupo. La peor de las consecuencias que puede causar una erupción volcánica es una disminución de la temperatura del aire, creada por las partículas de ceniza más pequeñas que flotan en la atmósfera e impiden que los rayos del sol lleguen a la tierra. Además, la liberación de gases sulfúricos como resultado de la erupción puede convertirse en lluvia ácida.
Las consecuencias de una actividad volcánica de esta magnitud pueden ser catastróficas para todo el planeta. Sin embargo, los científicos tienen prisa por disipar los temores de los residentes de Hong Kong, que surgieron en relación con el descubrimiento. Según los expertos, un supervolcán ubicado bajo tierra nunca volverá a entrar en erupción.
